Ya que tenía que sostenerlo con la mano puse el objetivo del revés, es decir, la parte delantera hacia atrás y la parte que debería ir unida al cuerpo hacia adelante. Vamos, lo que viene siendo "del revés".
Ventajas: conseguir una distancia de enfoque muy pequeña y hacer fotos cercanas (tipo macro) y además tener una profundidad de campo chica-chica.
Inconvenientes: en mi caso la calidad regulera de la imagen, mal enfocada, con algunos efectos raros por culpa de las lentes. Creo que la mayoría de los defectos se corregirían asegurando la correcta fijación del objetivo al cuerpo de la cámara, para lo cual venden unos "anillos inversores" que hay que pagar.
En definitiva, como estaba con un amigo, lo tomé de modelo:
También estaba con mi amiga Vela, también la tomé de modelo:
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